26 may 2017

La castillo-fortaleza Regenstein

Introducción

El norte de Alemania es un paisaje plano. La mayoría de sus fortificaciones medievales necesitaban defensas adicionales como fosas de agua o la existencia de pantanos, o se construían en puntos neurálgicos como puentes y cruces de rutas comerciales.
Todo es liso - excepto la cordillera Harz, en el centro del norte de la actual república federal. Alrededor y dentro del mismo Harz se construyeron numerosos castillos medievales y fortalezas modernas. Incontables señoríos, condados y ducados defendían sus minúsculas propiedades con gruesos muros ubicados en los picos de los montes del Harz.

El castillo medieval Regenstein

Plano del castillo medieval:
1: Torre de Homenaje, 2: Capilla, 3: Sala
4: Prision, 5: Sótano (Almacén), 6: Muros (destruidos)
7: Almacén, 8: Kemenate (sala con cimenea, destruida),
9: Cocina, 10: Camino de acceso a la antigua torre residencial
(destruida), 11: Pasillo, 12: Portal de acceso,
13: Teufelsloch (sala subterranea), 14: Restos del muro,
15: Salas de exposición, 16: Muro (destruido), 17: Foso.
Uno de esos castillos más emblemáticos es la castillo-fortaleza Regenstein. Inicialmente era un castillo de la dinastía de los condes de Regenstein, que comenzó existir con Conrad I. de Regenstein, un hijo del conde Poppo I. de Blankenburg. La primera mención de Conrad y su castillo proviene del año 1162.
El pequeño castillo tiene todas las ventajas posibles: La roca era piedra arenisca, lo que posibilita convertir literalmente el pico de uno de los montes del Harz en un castillo y la altura permitía controlar todo el recinto llano de su alrededor, dado que el “resto” de la cordillera estaba en dirección oeste.
La familia Regenstein necesitaba y se aprovechaba de su valor estratégico: No pasaba tiempo sin tener querellas, peleas o guerras con al menos uno de sus vecinos. Especialmente solía haber tensiones con el obispado de Halberstad y la abadía de Quedlinburg.

Vista del castillo desde la entrada de la fortaleza.

El muro oriental del castillo, con el foso que hoy en día es un camino (17).

Única entrada medieval: El enorme agujero de en frente albergaba al puente levadizo, justo por detrás está la torre de homenaje. Hay una escalera a la derecha del puente, para aceder por una puerta (12, 1).
 
Inscripción medieval, en el camino de acceso al Teufelsloch. Se puede leer (transcrito): 1090 Día de la Santa Ana (13)

El Teufelsloch (agujero del diablo), posiblemente servía para limpiar la ropa, o producir cuero (13).
 
Parte norte del castillo, en la izquierda se ve una puerta y ventana hacia una sala, en el fondo comienza el pasillo (11).
   
El pasillo, con arcos restaurados (11).

Sala, junto al pasillo y con una ventana (3).

Vista desde la sala (3).

Capilla del castillo, con tres ventanas y tres puertas de acceso (2).

Exterior de la capilla, vista desde la torre de homenaje (2).

La torre de homenaje (1).
 
Acceso al pasillo desde el sur (11).

Cocina del castillo, con paredes en el fondo muy enoscurecidos (9).

En la izquierda se ve la puerta hacia la cocvina (9), en la derecha la (nueva) escalera. Por debajo se encuentra la escalera antigua que daba acceso a la torre de residencia ubicada por encima del castillo, pero hoy destruida (10).

La torre de homenaje (1) vista desde la ubicación de la antigua torre de residencia (10).
 
En centro-derecha del fondo de la imagen se puede ver la ubicación de dos minúsculas celdas de prisión (4).
 
Plaza donde estaba el edificio del horno (8).
 
Acceso al sótano (vista desde el sótano) (7).
 
Vista del sótano (6).

La fortaleza moderna Regenstein

Plano de la castillo-fortaleza Regenstein:
A: Baluarte "Vogelsang" (en el corazón del antiguo castillo),
B: Plaza de la primera iglesia de la guarnición (en frente de la
antigua capilla del castillo medieval),
C: Parte destruida de la fortaleza en 1736, D: Puesto de vigilancia,
E: Inscripción de la ocupación francesa, F: Baluarte "Mühlberg",
G: Depósito de armas, H: Casa del comandante,
I: Mesón de la fortaleza, J: Casita de la fuente,
K: Baluarte "Friedrich-Wilhelmsburg", L y M: Baluarte
"Karlsburg", N: Baluarte "Scharfe Ecke",
O: Entrada principal, P: Segunda iglesia de la guarnición,
Q: Salidas de emergencia y/o ataque, R: Escalera
Con el avance y desarrollo de la tecnología militar (la pólvora, cañones) los castillos medievales perdieron su valor defensivo. Algunos dueños los modernizaron con nuevas defensas, los convirtieron en palacios residenciales con ventanas, espacio y decoración artística o simplemente lo abandonaron. Los condes de Regenstein se inclinaron en el siglo XV por la última posibilidad y se fueron a vivir en un palacio.
El castillo, ahora abandonado, se decaía en ruinas. Cuando en 1599 murió el último de los Regenstein, el castillo pasó por la mano de muchos dueños, hasta que se adueñaba en 1671 el príncipe elector Federico Guillermo de Brandenburgo del antiguo castillo.

El principado elector Brandenburgo (que desde 1701 era el nuevo reino de Prusia) reconoció el valor estratégico de Regenstein para proteger sus propiedades en occidente como en el norte, y construyeron alrededor del castillo medieval una moderna fortaleza.
Un conflicto con un vasallo desleal local obligó la rápida fortificación: Ya en 1671 se comenzó con la construcción, y a fin de año se finalizó con la excavación de una fuente de 197 metros de profundidad (!), dado que hasta entonces su falta había sido un punto débil del castillo medieval.
Igual como las modernas fortalezas de Pamplona o San Sebastián, tenía Regenstein ahora sus bastiones, pequeños muros gruesos y elementos arquitectónicos con forma de partes de estrella para los cánones.
Sin embargo, no se quedó mucho tiempo con el nuevo rol de fortaleza: En 1757, durante la guerra de los siete años (1756 - 1763), lo conquistaron los franceses. El siguiente año lo recuperó Prusia, pero durante la reconquista explotó el depósito de pólvora, inutilizando la fortaleza, que se abandonó después de la guerra. Despúes, en 1758, ordenó el entonces principe lector Federico II de Prusia la inhabilitación definitiva de la fortaleza.

Entrada a la fortaleza (O).

Fosa de la entrada a la fortaleza (O).

Fosa de la entrada a la fortaleza (O), en el fondo se puede ver la escalera (R).

Esquina de unón de los baluartes "Karlsburg" y "Friedrich-Wilhelmsburg" vista desde afuera de la fortaleza, despúes de curzarlos por un tunel construido despúes del abandono de la fortaleza.

El baluarte "Friedrich-Wihlemsburg" desde afuera.

Ubicación del antiguo depósito de armas (G), solo permanece la estructura tallada en piedra.

Foso al lado del baluarte "Friedrich-Wihlemsburg" (K).

Vista desde el baluarte "Friedrich-Wilhelmsburg" hacia el castillo medieval (K).

Antiguo molino de viento, construido en el baluarte "Mühlberg" (= Monte del molino) (F).

Vista al fundamento de la segunda (y nueva) capilla de la guarnición (P), con el baluarte "Friedrich-Wilhelmsberg" en el fondo (K).

Del mesón solo permanece la estructura tallada en la roca (I).
 
En el antiguo foso del castillo medieval se encuentran hacia la derecha dos salas talladas en la roca, de la edad moderna (en frente del C).

Una de esas salas talladas en la roca servía como establo (en frente del C).

La otra sala era un depósito (en frente del C).
 
Del tiempo de la ocupación francesa proviene la Flor-de-Lis tallada en el castillo (E).
 
Justo por debajo del castillo se intentó construir el baluarte "Vogelsang", de la cual no se ha conservado apenas nada (A).

En el fondo a la derecha se ve el antiguo almacén militar (G), en el fondo a la izquierda del baluarte "Mühlberg" (F) con los restos del molino, y justo en frente a la izquierda se ve partes de los restos del antiguo mesón (I).

El lugar turístico Regenstein

La por segunda vez abandonada castillo-fortaleza Regenstein comenzó con su segundo renacimiento en 1812. El nacionalismo, que nació durante las guerras napoleónicas, despertó el interés por el pasado de una nación, y en Alemania glorifico el romanticismo nacionalista la edad media. Cuentos legendarios se contaban de Regenstein, como la siguiente: Un día, el conde de Regenstein encerró a una princesa en su castillo. Ella rasco durante un año en la pared de arena arenisca con su anillo. Se libró, huyó, y volvió con ayuda para castigar al conde. Pero no estaba más. Cuando le buscaron, miró a través del agujero por la cual se había escapado la princesa, y vio al otro lado al conde sufriendo en el infierno. Le perdonó, tirando su anillo a través del agujero.
En Regenstein se celebraron fiestas medievalistas, torneos de caballeros, varias asociaciones historicistas cuidaron del castillo, incluso se construyó un hotel y una gastronomía en el pico del monte, dentro de la fortaleza, para los turistas. Así es Regenstein, hasta hoy día, un lugar turístico.

Al lado del depósito militar tallaron en 1892 los miembros la asociación "Harzklub-Zweigverein Halberstadt" un túnel entre los dos baluartes "Friedrich-Wilhelmsburg" y "Karlsburg", nombrando su destrucción "Raubgrafentunnel" o "Túnel del conde villano".Posiblemente era el resultado una idea romanticista medieval, que el baluarte de la edad moderna necesitaba un túnel que recordase a la edad media.

Placa conmemorativa de la destrucción, instalada por la misma asociación.

Paseo a través del túnel.
 
Entre el castillo medieval y el baluarte "Mühlberg" había un hotel y una gastronomia. Para mejorar la calidad se decidió en 1930, construir en la cima del baluarte "Friedrich-Wihlemsburg" un depósito de agua de hasta 30 cubimetros.
 
Incisción del mapa de Alemania en 1939, cuando Austria ya formaba parte del III. Reich. Se puede encontrar en el lado este del baluarte "Mühlberg", y posiblemente se hizo entre 1939 y 1945 por visitantes nacionalsocialistas.

Entre 1871 y 1914 jugaba Otto von Bismarck, el canciller quien unifico Alemania, un papel muy importante en la memoria de los nacionalistas alemanes. Numerosos monumentos se construyeron en toda Alemania, o se plantaron arboles como en ese caso. La asociación "Harzklub-Zweigverein Halberstadt" - la misma cuyos miembros tallaron un tunel porque si - plantaron en el 1. de abril 1895, el cumpleanos de Bismarck, el arbol.

Finalmente hay la plaza del torneo, que sirve para hacer las jornadas medievales con sus torneos, tradición desde el siglo XIX.

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12 may 2017

El acueducto de Urriza

Al lado oeste de Urriza, una localidad navarra al norte de Pamplona del municipio Imoz, va un acueducto, posiblemente procedente de la primera mitad del siglo XX, que hoy en día está en estado ruinoso.



Desconozco si formaba parte de las obras (en gran parte forzadas) públicas del Franquismo (similar al embalse de Yesa), o si proviene de proyectos previos a la misma (como el acueducto de Noáin). Pero me parece interesante si al menos se supiera de dónde a donde transportaba el agua, y el año de su construcción.


Un corte del acueducto.
En uno de los arcos se ve bien la fábrica de cemento.
La parte superior del acueducto, el canal, está en un estado deteriorado.
Otro corte del acueducto.
Pared exterior del acueducto.
Partes del acueducto está hecho de piedras.
Lateral del acueducto, alejandose dirección sureste de Urriza.